Cómo deshumidificar y purificar el aire de una oficina de forma natural

Limpieza en altura.
Gertrudis Bujalance

La ventilación es imprescindible en los actuales edificios de oficinas, con frecuencia ámbitos cerrados y aislados casi herméticamente del exterior. La exposición a un aire contaminado y no renovado puede producir contagios de virus comunes, trastornos de salud o agravamientos de enfermedades como el asma. Por suerte, algunas estrategias simples nos permiten purificar y deshumidificar el aire de una oficina de forma natural.

La ventaja principal de la ventilación natural es que sale gratis. Desde una perspectiva energética, es un sistema de higienización pasiva que no genera gasto alguno. En circunstancias óptimas, puedes conseguir airear todos los espacios de tu oficina de una manera plenamente inocua y respetuosa con el medioambiente. Si el edificio está situado en un emplazamiento ventoso, te podrás beneficiar de este factor.

Cómo deshumidificar y purificar tu oficina de modo natural

  • Lo primordial es ventilar el lugar de trabajo. La recomendación es abrir las ventanas a primera hora de la mañana y durante los momentos en que los despachos están vacíos. Debes abrir todas las ventanas de todas las estancias. En las horas de menor actividad laboral las partículas en suspensión son de menor tamaño y además no existe trasiego interior ni exterior que las agite o mueva de un lugar a otro.
  • Otra forma de purificar el aire que respiramos es usando productos ecológicos para limpiar, como el vinagre, el limón o el bicarbonato de sodio. No en vano al disminuir el uso de elementos químicos, evitaremos que se produzcan alergias y problemas en el aparato respiratorio.
  • La aeración natural es un sistema recomendable para deshumidificar tu oficina, especialmente cuando, además de aire, entra luz solar en los despachos. La corriente procedente del exterior contribuye a secar no solo las estancias, sino la estructura de la edificación. Por este motivo se recomienda abrir todas las puertas, no solo las ventanas, en los momentos elegidos para airear el lugar de trabajo, a fin de eliminar la acumulación de vapor característica de la noche. Además, debes abrir los cajones de las mesas y las portezuelas de los armarios, para deshumidificar por completo todo el mobiliario de la oficina.

¿Trabajamos en oficinas nocivas para la salud?

Los habitantes de las ciudades pasan en espacios cerrados (hogares, despachos, tiendas y entidades oficiales) entre el 80% y el 90% de su vida, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). La calidad del aire interior de los ámbitos cubiertos protege la salud y el bienestar de los empleados, reduciendo los trastornos sanitarios y mejorando el rendimiento laboral.

Según análisis de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA), el aire de los edificios contiene el doble de impurezas que el aire libre y en torno a un 30% de los edificios evaluados tienen una baja calidad ambiental.

En una oficina, la toxicidad del aire está relacionada con los materiales de la edificación, con la actividad profesional del lugar de trabajo, con el tratamiento del aire interior del recinto y con la cantidad y frecuencia de usuarios de su espacios.

¿Se puede medir la Calidad del Aire Interior?

Hace apenas un par de décadas la medición de la calidad del aire interior se consideraba un proceso especializado y no asequible para capacidades económicas de menor alcance. Todo parece indicar que este procedimiento se está popularizando, por así decirlo. En la actualidad existen medidores de calidad del aire por pocos cientos de euros y la tendencia es que en un par de años bajen a 100 euros.

Está previsto que los los teléfonos móviles acaben incorporando estos sistemas de medición de la higiene ambiental de un lugar específico. En un plazo de tiempo no demasiado largo, nuestros dispositivos personales serán capaces de detectar la presencia de virus y bacterias en nuestro entorno inmediato. El objetivo sanitario, que sin duda le añadirá atractivo comercial, es reducir los riesgos de alergias y de contagio de enfermedades.

Normativas de Calidad del Aire Interior en España

A pesar de que el nuevo RITE (Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios) obliga a limpiar cada año los conductos de aire acondicionado, son muy pocas las empresas que lo cumplen y el aire de sus oficinas está enrarecido y no es salubre.

En la actualidad, el Código Técnico de la Edificación (CTE) especifica que todas las nuevas licitaciones de edificios han de contar con al menos un sistema de ventilación híbrido, que es aquel que cuenta con aspectos mecánicos y naturales, por lo que podemos decir que no podemos depender exclusivamente de la ventilación natural.