Limpieza en colegios: protocolos a seguir

Gertrudis Bujalance

La educación de los niños y los jóvenes tiene lugar en las escuelas, donde pasarán gran parte de su primer periodo de formación. Por tanto, la limpieza en los colegios, como factor que garantiza la salud y el bienestar de la población infantil y juvenil, es esencial en la buena marcha de un país.

Aun así, esto puede resultar un empeño arduo, sobre todo por los elevados números de alumnos y profesionales de todo tipo que hay en las escuelas. Precisamente este es un factor que aumenta, más si cabe, la relevancia de los planes y los protocolos de limpieza y desinfección.

Planes y protocolos de limpieza escolar

La limpieza y la desinfección de los centros educativos es una actividad de relevancia evidente, que involucra a todos los individuos que forman parte del entorno de la enseñanza primaria, desde los colegiales más pequeños hasta el personal administrativo.

Sin embargo, no se deben confundir limpieza y desinfección. La limpieza implica procedimientos para retirar los gérmenes de los objetos o superficies con el uso de agua y jabón, mientras que la desinfección consiste en matar esos gérmenes con productos químicos.

Pero nada de esto puede tener los efectos buscados sin incluir protocolos de conducta para el profesorado, el alumnado y el resto del personal del colegio.

Planes de la limpieza en colegios

La limpieza del centro escolar siempre debe diseñarse tomando en consideración los distintos ámbitos o zonas que forman el recinto, además de la cantidad de personal que pueda haber.

Un plan de limpieza escolar consta de estas etapas:

  • Rutina diaria. Estas son las tareas sistemáticas como el barrido, fregado y desinfección de suelos, aseos, vestuarios (si los hay), la ventilación natural, la limpieza de mesas y material escolar, las aulas o salas informáticas y la eliminación de desperdicios de cada zona.
  • Específica semanal. Puede incluir la puesta a punto de zonas poco frecuentadas o espacios menos utilizados con una frecuencia de 2 a 3 veces por semana, como estantes, pupitres y ordenadores no compartidos, paredes y puertas, y equipos de deporte.
  • Selectiva mensual. Incluye tareas como la limpieza de áreas de almacenamiento, lavado de cortinas de oficinas y limpieza de lámparas.

Protocolos de higiene en las escuelas

Para complementar y afianzar las tareas programadas de limpieza, tanto los estudiantes como el personal deben asumir ciertos protocolos de orden y saneamiento durante la jornada: cuidar el material escolar, evitar rayar paredes y mesas, dejar la pizarra limpia tras las clases y mantener en buenas condiciones los aseos del colegio. Para convertir esta pauta de conducta en una estrategia eficaz es imprescindible concienciar y sensibilizar al alumnado en cuanto a la necesidad de mantener una buena higiene.

Si los reglamentos del colegio impulsan la participación activa de los escolares en actividades sencillas de limpieza, estos pueden acostumbrarse a vaciar las papeleras de cada clase, limpiar los escritorios y limpiar las bibliotecas u otras zonas comunes.

Selección de productos de limpieza en las escuelas

Es importante que las escuelas seleccionen cuidadosamente los productos de limpieza, evitando en la medida de lo posible aquellos que contengan productos químicos tóxicos que puedan causar accidentes por contacto o ingestión accidental.

El personal encargado de la limpieza puede utilizar productos higiénicos a base de cloro, que limpian y desinfectan a la vez. Estos productos se pueden utilizar en superficies como el suelo, lavabos, baños, etc.

Además de las tareas diarias, semanales o mensuales, es recomendable contar con el apoyo de empresas de limpieza, capaces de realizar procedimientos más efectivos de forma periódica. Estas empresas suelen emplear métodos como la limpieza a vapor, criogenización o limpieza con ozono, que son altamente eficientes y no contienen agentes químicos perjudiciales.

Es esencial contratar una empresa especializada en el control de plagas para la desinsectación, desratización y desinfección de las escuelas, ya que aplicarán procedimientos de última tecnología. Es importante evitar la dispersión de cebos para plagas, ya que estos pueden ser ingeridos por los niños y causar problemas.

Importancia de la desinfección como parte de la limpieza en colegios

Además de contribuir a mantener la imagen adecuada del centro, la limpieza y desinfección de los colegios elimina la suciedad, las bacterias, los virus y otros microorganismos que pueden causar enfermedades graves tanto en los escolares como en el personal docente y administrativo.

La limpieza en las escuelas también mejora la productividad de alumnos y profesores, ya que al mantener un ambiente limpio y ordenado, crea un entorno más agradable que favorece la concentración y el aprendizaje.

En suma, para alcanzar altos estándares de higiene, es necesario desarrollar planes y protocolos de limpieza y desinfección en las escuelas, en los cuales el personal especializado y todas las personas que estudian y trabajan en ellas deben comprometerse. Es recomendable contar con el apoyo de expertos en limpieza que puedan brindar asesoramiento y utilizar los métodos más avanzados para la higienización.