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Departamento de Marketing Geberit

Limpieza en los baños públicos con soluciones sostenibles que no contaminan

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Los nuevos estándares obligan a ser más rigurosos que nunca en la limpieza y la sostenibilidad de una estancia tan sensible a la suciedad como es el baño. Para Geberit, especialista en porcelana sanitaria y tecnología para el baño, no se trata de dedicar más horas a la limpieza de los baños públicos; sino de adaptar o cambiar los elementos para que los baños, ya sean públicos o privados, resulten estancias mucho más higiénicas y respetuosas con el medio ambiente de lo que han sido hasta ahora.

Reducir contaminantes en la limpieza de los baños públicos

La limpieza de los baños públicos suele ser un punto determinante de cara a la imagen de un establecimiento. Además, si se buscan certificados de construcción sostenible o si simplemente la propiedad tiene conciencia medioambiental, es importante optar por soluciones que no solo disminuyen el consumo de agua en su uso diario, sino que también generan menos gasto de agua y reducen el consumo de agentes limpiadores contaminantes, ya que resultan muy fáciles de limpiar.

El quid de la cuestión está en diseñar baños que reduzcan el número de elementos que quedan a la vista y que no presenten rincones donde se pueda acumular la suciedad.
La sencilla solución que propone Geberit consiste en empotrar la cisterna del inodoro y optar por inodoros, bidés, lavabos y muebles suspendidos o volados, que no toquen el suelo de la estancia. De esta manera, no solo se consiguen superficies lisas y sin recovecos, sino que el suelo queda libre de obstáculos y limpiarlo se convierte en una tarea fácil, rápida y sostenible.

La misma lógica rige la elección de inodoros y urinarios con diseño interior Rimfree, en lugar de sanitarios convencionales. Estos modelos Rimfree eliminan la brida para la descarga del agua y se limpian muy fácilmente, ya que desaparecen en su interior los huecos que favorecían la acumulación de residuos y sedimentos.

De hecho, los inodoros y urinarios sin rebordes en el interior se están convirtiendo en un ‘must’ en aquellos proyectos que buscan la máxima higiene y sostenibilidad en los baños. En los últimos años, al realizar sus obras de reforma o ampliación, muchos centros comerciales y otros establecimientos con gran afluencia de público (como terminales de aeropuertos, puertos y trenes e incluso hoteles, bares y restaurantes) se han pasado, sin dudarlo, a las soluciones empotradas y suspendidas en la pared. Y es que se han dado cuenta de las múltiples ventajas que aportan cuando lo que se busca es conseguir que los baños estén siempre impecables para sus clientes.

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El comportamiento del usuario

Ahora bien, un tema que merece una mención aparte es el comportamiento del cliente y el uso que hace del baño público. Por ejemplo, está comprobado que, en los baños de establecimientos públicos, un gran número de personas no “tiran de la cadena” después de ir al baño. Por tanto, muchas veces no basta con que la propiedad haya optado por esas soluciones higiénicas de las que estamos hablando. Hay que ir un paso más allá, sobre todo en un momento como el actual en que la higiene y la limpieza son más que nunca sinónimo de salud y seguridad.

Se trata de anticiparse al comportamiento del usuario. Es decir, si se sabe que el usuario probablemente no activará la descarga, la solución pasa por equipar las descargas de agua de inodoros y urinarios de los baños públicos con soluciones que se activan automáticamente a través de sensores de detección del usuario por infrarrojos. Al no necesitar de ninguna acción por parte de la persona que acaba de utilizar el baño, es más probable que el siguiente usuario lo encuentre en óptimas condiciones.

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Un plus de higiene, ahorro y sostenibilidad

Por otro lado, si se desea disminuir el consumo de agua y energía, las soluciones electrónicas por sensores de detección son muy recomendables también para la activación del flujo del agua de los grifos para lavabos. Este sistema evitará el derroche de agua que provocan los grifos que quedan abiertos por descuido, por ejemplo. Además, esta tecnología permite a la propiedad regular el volumen de agua/segundo del flujo del grifo, así como la temperatura del agua, por lo que es más fácil llevar un control del consumo. Para añadir más ventajas, hay grifos electrónicos que no consumen electricidad. Se trata de modelos de alimentación autónoma gracias a un generador incorporado que utiliza la propia potencia del flujo del agua para producir la energía que necesitan los grifos para su funcionamiento.

Y todas estas soluciones touchless no solo periten ahorrar agua y energía, sino que añaden, además, un plus de higiene y limpieza en los baños al evitar el contacto directo de las manos de los usuarios en las superficies.

Por último, es importante tener en cuenta que, para asegurar el máximo confort de los clientes, hay que optar por modelos de calidad, con sensores que aseguran una buena descarga gracias a su correcto ángulo de detección del usuario.