José Luis García Hurtado Miembro de la Comisión de AbsentismoAELMA

AELMA: “Determinados factores están produciendo un incremento del absentismo laboral que tenemos que intentar frenar”

El problema del absentismo laboral en el sector de la limpieza profesional no se refiere en ningún caso a cuestionar la evaluación médica, si no a detectar los factores que hacen que, sobre todo, tras la pandemia del Covid19, las cifras se hayan disparado. Por ello, José Luis García Hurtado explica en esta entrevista el papel de la Comisión de Absentismo, que decidió crear AELMA, para analizar y buscar soluciones a esta cuestión.

En primer lugar, nos gustaría saber ¿por qué se constituyó esta Comisión de Absentismo de AELMA? ¿Cuál es el cometido del mismo?

El absentismo laboral es una problemática clave en cualquier actividad empresarial pero más aún cuando va ligada a la mano de obra intensiva. Los datos que ofrecía nuestro sector hasta la pandemia ya eran preocupantes, pero con la recuperación de la actividad normalizada, el incremento del absentismo es continuo.

Ante este escenario, AELMA decidió constituir una Comisión de Absentismo para analizar y buscar soluciones a esta problemática. En este sentido, la comisión centra su actividad en dos cuestiones: por un lado, cuantificar el absentismo y, por otro lado, analizar todas aquellas medidas que puedan atajar este absentismo cuando éste sea fraudulento.

Desde esta asociación queremos dejar muy claro nuestro compromiso y protección a todos los trabajadores en sus procesos de enfermedad cuando están basados en datos clínicos contrastados.

¿Cuáles son las cifras de absentismo del sector que manejan para Madrid desde AELMA? ¿Tienen cifras del resto de España?

Hasta antes de la pandemia el porcentaje de absentismo promedio rozaba el 5,5 por ciento. En el momento actual asciende a un 7,5 por ciento (en ambos casos respecto a las jornadas teóricamente trabajadas). Si a las cifras anteriores sumamos un 2,5 por ciento adicional y derivado de los derechos que emanan de los convenios colectivos (permisos retribuidos, horas sindicales, etc.), todos los días un 10 por ciento de la plantilla se ausenta de sus puestos de trabajo. Los datos a nivel nacional son muy similares.

trabajador limpieza con una manguera fregando la calle

“La Comisión del Absentismo focaliza su acción en aquel absentismo cuyo origen tiene un bajo contraste facultativo y que, además, se produce en las personas de manera reiterada”

¿Qué acciones van a llevar a cabo para buscar soluciones? ¿Por qué es una situación preocupante?

La Comisión de Absentismo focaliza su acción en aquel absentismo cuyo origen tiene un bajo contraste facultativo y que, además, se produce en las personas de manera reiterada. Las acciones son variadas y tenemos que distinguir entre acciones técnicas hacia la plantilla de trabajadores, entre otras, mejorando la selección de personal, procurando una mejor adaptación de las personas al puesto de trabajo, procurando la conciliación cuando ésta sea posible, y acciones que podemos definir de un mayor calado como es la investigación de aquellas bajas médicas que generan un gran cuestionamiento, ya sea a través de la inspección médica o incluso con la aportación de detectives privados para hacer el seguimiento de determinados trabajadores.

Hay dos impactos fundamentales ante el absentismo laboral:

a) Ausencia injustificada del puesto de trabajo y sin el preaviso mínimo necesario para poder cubrir esta ausencia, lo que implica una mala calidad del servicio e, incluso, que éste no se llegue a prestar.

b) Un incremento de los costes de producción excesivamente elevados ante el cual las empresas tienen que incluir en sus cálculos presupuestarios unos costes derivados del absentismo que los clientes no entienden, a la alternativa de no repercutir en los clientes estos incrementos de costes y transformar los contratos en deficitarios.

¿Cuáles cree que son los motivos para que la tasa esté tan alta en el sector?

Hace ya muchos años que se viene complementando la baja médica en nuestro sector desde el primer día. Esta medida hizo incrementar el absentismo de un 3 por ciento aproximadamente hasta un 5 por ciento aproximadamente e incluso hasta un 5,5 por ciento previo a la pandemia.

Pero la gran pregunta es ¿Qué ha pasado durante y después de la pandemia? Es muy difícil llegar a entenderlo. Nos encontramos, por un lado, con un envejecimiento natural de las plantillas y las consecuencias lógicas que repercuten sobre la salud de todos nosotros y, por otro lado, muchos nuevos trabajadores de mediana edad o muy jóvenes con muy poco compromiso de realizar una carrera profesional dentro de nuestra actividad.

Adicionalmente, estamos valorando cómo, en determinados entornos, el teletrabajo es muy atractivo frente a los trabajos, como en nuestro sector, que de manera irremediable siempre son presenciales. Seguimos estudiando esta materia porque entender el origen es la única manera de acabar con este incremento permanente.

¿Cómo afecta esta situación a los empleados?

Conjuntamente con la empresa, los empleados comprometidos tanto con su empresa como con el cliente, son los más perjudicados ya que, en tanto y cuanto el trabajador absentista no informa con un mínimo de tiempo que al día siguiente no va acudir al puesto de trabajo, los trabajadores comprometidos se ven desbordados en ocasiones. Precisamente son los propios trabajadores comprometidos los que denuncian ante la empresa de una manera muy insistente esta situación.

“Debemos evitar cualquier tipo de cuestionamiento sobre los criterios médicos aplicados a cada trabajador de manera individual”

¿Cuáles son las causas por las que se produce el absentismo en el sector?

Como comentaba anteriormente, conocer el origen de las causas es esencial para atajar el problema. El absentismo derivado de enfermedades graves, enfermedades no graves pero que precisan un tratamiento en el tiempo y enfermedades leves que requieren un breve reposo domiciliario supone aproximadamente el 50 por ciento del absentismo por enfermedad total. El otro 50 por ciento suele ser el de una gran complejidad de entender y de intentar paliar, ya que se mezclan situaciones muy variadas tanto por el origen de la molestia como por la reiteración que un mismo trabajador puede tener de esta molestia o de otra similar.

Es realmente complicado hacer valoraciones desde el punto de vista empresarial porque no podemos ni debemos cuestionar la evaluación médica. Pero es en este grupo donde la información proviene de los propios compañeros de un mismo centro de trabajo, trabajadores comprometidos y que nunca admiten que otros trabajadores ante una situación de problemática laboral o incluso familiar afirmen: “Pues voy al médico y me cojo la baja”. El gran problema es que esa afirmación, en muchísimos casos, se convierte en realidad.

Desde AELMA debemos evitar cualquier tipo de cuestionamiento sobre los criterios médicos aplicados a cada trabajador de manera individual. Lo que no podemos es dar la espalda a que determinados cambios políticos, criterios sobre los complementos en baja médica, el desbordamiento de casos ante la inspección médica, etc. han producido y están produciendo un incremento del absentismo que tenemos que intentar frenar por el bien de nuestra actividad.